Los tratamientos
psicológicos en grupo funcionan. No obstante, todavía no sabemos exactamente
por qué. Los participantes en este tipo de tratamientos suelen atribuir la
mejoría a factores grupales como el apoyo o la cohesión, pero también sería
posible que los mismos factores responsables de la mejoría en la terapia
individual lo fueran de la terapia en grupo.
Uno de los factores que
podría explicar la mejoría de los tratamientos en grupo es la influencia social
normativa. Según esta variable, los participantes del grupo modificarían sus
comportamientos y sus actitudes para adaptarlas a las normas grupales.
Un reciente estudio sobre
la eficacia del tratamiento en grupo de los trastornos alimentarios ha observado
que, efectivamente, la influencia social normativa precedió a la mejoría del
trastorno alimentario y fue un sólido predictor de la eficacia del tratamiento
en grupo.
En otras palabras, aspectos del grupo como observar a otro paciente
argumentar en contra del ideal femenino de extrema delgadez parecen ser los
desencadenantes del proceso de adaptarse a esa visión normativa y, por tanto,
iniciar los cambios conductuales y cognitivos que conducen a la mejoría del
trastorno.
Por consiguiente, parece
fundamental que los terapeutas sean capaces de identificar aquellas
afirmaciones de los pacientes que favorecen la mejoría clínica y que las
refuercen hasta convertirlas en el conjunto de normas que sirvan como modelo a
imitar por el resto de los participantes.
Cruwys T, Haslam SA, Fox
NE, McMahon H. "That's not what we do": Evidence that normative
change is a mechanism of action in group interventions. Behav Res Ther. 2015
Feb;65:11-7.